viernes, 20 de abril de 2007

COSMOVISION

Literalmente, sería la visión acerca del cosmos.

"κόσμος": Esta palabra de origen griego se traduce como orden u ornamentos pero como muchas otras tiene un sentido general que para efectos de nuestro tema, sería un sistema ordenado o armonioso.

Pero en una connotación absoluta significa todo lo que existe, incluyendo lo que se ha descubierto y lo que no.

Y resulta que en ese cosmos tenemos lugar nosotros, los humanos y demás especies, una realidad que, quienes ejercitan la observación, la definirían como la unidad en la diversidad.

Sin embargo nos resulta difícil no solo comprender ese significado sino también ubicarnos, sentirnos, sabernos que somos uno en ese Cosmos porque tendemos y esto más por aculturación, a vernos y sentirnos separados de esa realidad.

Esta condición es común, particularmente, en los países invadidos porque una vez sometidos recibimos la instrucción desde el punto de vista de los intereses de los invasores mal llamados conquistadores y entonces somos victimas como de un espejismo o sea una realidad fantasmagórica dentro de la realidad, sin adjetivos.

De modo que lo que hemos aprendido, según la historia, en el curso de los siglos desde que se sabe de la existencia del humano es relativo, circunscrito a dictados, manipulaciones.
Relativo porque todos los conocimientos se sustentan en nuestra posición en un planeta determinado, en un sistema determinado del que apenas sabemos su esencia y por eso se da crédito a la investigación.

Un ejemplo de esto ocurrió durante el nazismo en Alemania cuando las autoridades nacional socialistas enviaron al fuego todos los libros sobre diversos temas y disciplinas, censuraron lo que llamaron la ciencia oficial y decidieron crear su propia ciencia contradiciendo lo establecido.
Y, asómbrese, gracias a ello obtuvieron conocimientos de otra naturaleza que tienen aplicación en la actualidad.

Afirmo que somos proclives a la rutina, a la aceptación de todo lo que se antoje al mundo del mercado, de la distracción, a caminar con la cabeza gacha, los hombros encogidos, resignados a todo lo que se plante contra nosotros.

Olvidamos que a nuestro alrededor, hay elementos que integran nuestro cuerpo y que son vitales no solo allegarlos a nosotros sino analizarlos, incorporarlos con razón, disponiendo la inteligencia.

Si no puede preguntar a decenas de Guatemaltecos, por ejemplo: ¿vio el amanecer?, ¿se fijó en el color que presentaban las nubes a las cinco y media de la mañana? Y el color del sol, naranjado por la temporada de calor.?
No nos damos cuenta ni en que fase se encuentra la luna o si hay trazas de frío o lluvia y, para ajustar, huimos de esos elementos porque hace mucho o un insoportable calor, porque si llueve me enfermo y si me da un chiflón, también o sea, somos los únicos seres vivientes que no estamos en nuestro habitat.

Hablamos de los elementos, calificados como químicos por la ciencia racionalista, dogmática, la que no se atreve a prescindir de un laboratorio a pequeña escala, cuando tenemos uno, millones y millones de veces amplio para realizar los experimentos.

Son los elementos Fuego, Agua, Tierra, Aire y cada uno ellos conteniendo una infinidad de sub elementos.

Así, por ejemplo, el fuego se relaciona con el sol acerca del cual, algunos físicos retirados, solían afirmar que no es el astro el que nos da calor sino la idea en nuestra mente.
Y, siendo atrevidos, para variar, podríamos experimentar si es cierto y, en lugar de identificar el sol con el calor lo hacemos con la luz, el efecto sería distinto, totalmente.
Experimentaríamos algo así como una fuente de carga para nuestro cuerpo, ingresando por determinado centro o chacra que en sánscrito es algo así como centro de energía del cuerpo humano.
Pero aun esa definición del español no dice todo lo que significa.

Los antiguos tuvieron la virtud de ejercer la observación para estudiar y percibir una realidad que subyace en todo lo que podemos ver y no ver y que nos incluye en ese todo.

Citamos como ejemplo la siguiente oración:
"If the doors of perception were cleansed
everything would appear to man as it is, infinite"
William Blake

Si limpiaran las puertas de la percepción todo aparecería acudir a como es, el infinito " Guillermo Blake

Para terminar, citamos a Giordano Bruno, un clérigo que mando quemar la inquisición porque se atrevió a hablar de la pluralidad de mundos y respecto a quien, por sus escritos e investigaciones, mas de un seguidor dijo de el:

En Giordano Bruno, la noción del universo infinito era la consecuencia ineludible de una intuición metafísica fundamental: la intuición del infinito como realidad o si se quiere la intuición del Ser infinito.

Les recomiendo si aun a estas alturas de una civilización en declive, se puede, buscar y leer su obra:

“Sobre el infinito universo y los mundos”

No hay comentarios: